La bodega San Roque de la Encina representa la unión de un pueblo, Castrillo de la Vega. Somos el fruto de la fuerza de muchos viticultores que apostaron por hacer las cosas bien, por la lucha de un sueño que querían que se convirtiera en realidad. Así nace San Roque de la Encina en 1956. Y hoy en día, somos los descendientes de esos valientes, los que seguimos apostando por un objetivo común: “Trasladar el mimo con el que cuidan las uvas al vino, fruto de su trabajo y dedicación” Bodega San Roque de la Encina es un homenaje a todos ellos, a nuestros padres, a nuestros hijos y a nuestro futuro.
Recogida de nuestra primera cosecha de uva
Aumento de capacidad y renovación de maquinaria e instalaciones
Se constituye legalmente la Bodega San Roque de la Encina
Constitución del consejo regulador de Ribera del Duero
Mejora de los depósitos, sustitución de maquinaria por acero inoxidable, salida al mercado con nuestros primero vinos embotellados, jóvenes y crianzas
Ampliación de la bodega que supone un aumento de la capacidad de producción de 1.100.1000 litros más de los que se elaboran antiguamente.
Reforma total de la bodega e instalaciones, tolva de recepción, bombas de trasiego y depósitos. Ampliación a 400 hectáreas de viñedo.
Creación de un departamento de exportación, nueva imagen corporativa y apertura internacional
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